Muchas personas alrededor del mundo, cuando se dan a la tarea de realizar algo, tratan de hacerlo lo más perfecto posible, aunque sea bastante difícil.
A eso se le llama perfeccionismo, y no es algo malo, pero sí te puede llevar a pasar muchísimos dolores de cabeza, por lo que te recomendamos hacerlo lo mejor posible, pero no desesperadamente, sino despacio y con paciencia.
Tampoco es que caerás en el conformismo, porque es algo incluso peor que el perfeccionismo, lo que quiere decir que prácticamente te conformas con cualquier cosa, lo cual está mal, aunque depende de los casos. Ahora que tocamos el tema del perfeccionismo, es importante que resaltemos que por muy sorprendente que suene, hay instituciones que suelen equivocarse.
Sí, partiendo desde la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) hasta la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS), estas instituciones gubernamentales en España, pueden cometer errores, pero lo hacen pocas veces. En este artículo, te hablaremos de un trámite que podrás presentar si notas algo raro, y es el modelo de recurso potestativo de reposición. ¡Vamos!
Modelo recurso potestativo de reposición qué es
Antes que cualquier otra cosa, y de ahondar en aguas más profundas, te explicaremos, en este primer segmento, lo que es y lo que representa un modelo de recurso potestativo de reposición, el cual es ampliamente utilizado en cualquier país del mundo cuando alguna institución, sin importar su competencia, comete un error o te sientes disconforme con su accionar.
Por ejemplo, cuando no te sientas completamente conforme con las decisiones emanadas por la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) o de cualquier otra administración pública en España, puedes hacer la debida reclamación a través de la aplicación de un recurso protestativo de reposición. Acá, te diremos lo que es, cómo presentarlo y el modelo adecuado para usar.
El recurso protestativo de reposición, es una herramienta de vital importancia que todos y cada uno de los ciudadanos españoles tienen a su disposición para poder recurrir a las decisiones de las administraciones públicas, y que a su vez, te permitirá revisar y checar el acto administrativo por el mismo órgano o institución que lo dictó. ¿No has entendido? Descuida, tenemos otro ejemplo.
En caso de que el Ayuntamiento de tu ciudad te haya impuesto una multa por equis motivo, debiste haber presentado alegaciones que no las tomaron en cuenta, y ante esto, podrás darle uso al recurso de reposición. Esta, es la última instancia para tratar de resolver tu problema por la vía administrativa sin salir de los cauces del mismo organismo. En pocas palabras, se trata de un recurso potestativo, que no es obligatorio y puedes prescindir de él.
Ahora, si la cosa se complica y pasa a un plano más judicial, tendrás la opción de presentar un recurso de reposición, o en tal caso, hacer acto de presencia personal ante la justicia ordinaria, pero esto lo conseguirás presentando un recurso judicial contencioso-administrativo, lo que quiere decir, que después de todo esto, deberás acudir a los juzgados para un juicio.
Ningún órgano de la Administración Pública es infalible, no importa si es el Estado Central, las Comunidades Autónomas, los Ayuntamientos, Hacienda o el mismo SEPE, todos estos están propensos a equivocarse y no tomar las mejores decisiones, lo cual deja en descontento a los ciudadanos. Si no estás conforme con la decisión de estos, opta por el recurso potestativo de reposición, te será de mucha ayuda. ¡Suerte!
Modelo recurso potestativo de reposición multa tráfico
¿Te ha pasado que vas a estacionar tu vehículo en una zona donde hay cordones para hacerlo pero de igual manera te imponen una multa? ¿A quién no le ha pasado? Creo que a todos al menos en una ocasión, pero claramente a los que tienen vehículo. Si te colocaron una multa de tráfico por aparcar, y no estás para nada de acuerdo con ella, lo más recomendable, es que recurras.
Si haces eso, y dentro del plazo establecido por la ley has recibido la desestimación o la negativa de dichas alegaciones a parte de la debida notificación para el pago de la sanción pertinente, pues tranquilo, que aún te queda una opción por agotar, y es el de plantear un recurso de reposición contra esa resolución denominada como “sancionadora”.
Hay ciudadanos que no poseen vinculación alguna con este tipo de acciones, por lo que en ocasiones, cuando les toca, se les hace extremadamente complicado seguir el trámite. No obstante, para llevarlo a cabo, se te hará fácil, pero debes seguir y respetar los pasos elementales para poder presentar un recurso de reposición para recurrir a la multa por aparcamiento.
El primer paso que deberás seguir, es el de redactar el encabezamiento y en el mismo, solo tendrás que colocar los datos de la persona u organismo que tramita el expediente sancionador: Director General de Tráfico de la Jefatura Provincial –para expedientes tramitados por Jefaturas provinciales-, el Director de Tráfico del Gobierno Vasco o del Servicio Catalán de Tráfico –para los tramitados por Gobierno Vasco o Generalitat de Catalunya.
El segundo paso, es el de identificar el expediente y nuestros datos personales, por lo que dejarás muy en claro el número de expediente que figura en la multa de aparcamiento y nuestro nombre, DNI y domicilio a efectos de notificación. Posterior a este paso, expón que has recibido “notificación de resolución sancionadora por supuesta infracción” y añade el artículo y la ley, normativa u ordenanza a la que se refieren en el correspondiente expediente sancionador.
A parte de lo anteriormente mencionado, anexarás lo siguiente: “no estando conforme con la resolución, se interpone recurso de reposición por los siguientes motivos”. Ese será el momento de dejar claro por qué no estás de acuerdo con la resolución, que puede ser: no era verdad que tu vehículo estuviese ahí, porque paraste brevemente pero no estacionaste, porque tu automóvil presento un desperfecto, o porque no existía señalización alguna.
Si deseas que de verdad prospere tu recurso, es muy importante, y es que deberás argumentar por qué impugnarás ante la resolución sancionadora, en las que podrás colocar lo siguiente: porque no recibiste denuncia previa, han prescrito el plazo, porque solicitaste pruebas para la defensa y no fueron facilitadas, porque ha caducado el procedimiento, entre muchos otros.
Por último, y para dar por finalizado estas sugerencias o pasos a seguir, recuerda solicitar “se admita este escrito, y teniendo en consideración los motivos expuestos en él, se revoque la resolución sancionadora y se archive el expediente sin declaración de responsabilidad”, para posteriormente finalizar con el lugar, la fecha y la firma. ¡Es todo!
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